Las mejores cortadoras de tubos del 2025

La Rothenberger Industrial Cizallas es ideal para quienes suelen trabajar con tubos de plástico, especialmente fontaneros, instaladores o incluso aficionados que montan sistemas de agua en casa. Su tamaño (2.54 cms de alto x 27.94 cms de largo x 12.7 cms de ancho) la hace manejable, y aunque el peso declarado es 0 kg (seguramente un error),el diseño transmite robustez, típico de esta marca. Cortar tubos de hasta 42 mm sin esfuerzo es lo que promete, lo que viene muy bien cuando hay que hacer cortes limpios y precisos en tubos multicapa.

Una de sus mejores bazas es la cuchilla de acero inoxidable, que no solo dura más sino que evita tener que hacer fuerza en exceso, y el mango de seguridad aporta confianza durante el uso, evitando accidentes tontos. Esto facilita bastante el trabajo, sobre todo cuando tienes que tenerlo todo perfecto y sin margen de error. En resumen, si buscas una herramienta fiable para cortar tubos plásticos con comodidad, parece que merece la pena echarle un vistazo.

Este cortador de mangueras de Draper es justo lo que puede venir bien a cualquiera que se dedique al bricolaje o incluso a profesionales que necesiten un corte limpio y preciso en tubos de plástico o goma. Es especialmente útil si trabajas con mangueras de distintos diámetros, ya que corta desde 3 hasta 14 mm sin complicaciones.

Lo que me llama la atención es la hoja de acero inoxidable en forma de V, diseñada para evitar que el tubo se aplaste o dañe al cortar, algo que suele pasar con herramientas más básicas. Además, el mango con goma termoplástica y dos tonos promete un agarre cómodo y firme, algo importante para no acabar con las manos cansadas en trabajos repetitivos. Parece una herramienta sólida y práctica, ideal para quien busca algo fiable sin complicaciones.

Este kit de TNSLAND con cortatubos y calibrador en Rojo + Azul parece ideal para cualquiera que se mueva en fontanería doméstica o trabajos con tuberías de plástico. Ya sea que andes arreglando tubos de PVC, multilámina para calefacción o incluso mangueras, su diseño robusto y la cuchilla de acero inoxidable prometen un corte limpio y sin complicaciones, evitando los típicos pellizcos o bordes irregulares que fastidian un trabajo bien hecho.

Me gusta especialmente que el mecanismo de trinquete y el mango ergonómico facilitan el agarre y la precisión, algo clave cuando no tienes un taller a mano y lo haces todo en casa o el taller del pueblo. Además, el calibrador ayuda a dejar la tubería perfecta para unir sin fugas. En resumen, parece una herramienta práctica para tener a mano si sueles meterte con tuberías y no quieres acabar frustrado con cortes torpes.